Servicio de anestesia 1

EL ESPECIALISTA

REVISTA Nº 121 – DICIEMBRE 2015

En este número, no vamos a hablar de un especialista, si no de una unidad de especialistas, del Servicio de Anestesia del Hospital San Juan de Dios de León.

Si tiene programada una cirugía, es posible que tenga preocupaciones acerca de la anestesia. La idea de estar inconsciente o de perder temporalmente la sensibilidad puede resultar desconcertante. Conocer los aspectos básicos sobre la anestesia puede ayudar a calmar sus preocupaciones.

¿Qué es la anestesia?

El término anestesia significa ausencia de sensibilidad y de sensación.

La anestesia es el uso de medicamentos para evitar la sensación de dolor u otra sensación durante una cirugía u otros procedimientos que podrían ser dolorosos. Los diferentes tipos de anestesia, ya sea que se administren como inyectable o mediante la inhalación de gases o vapores, afectan al sistema nervioso de varias formas, al bloquear los impulsos nerviosos y por tanto el dolor.

Dentro de las condiciones de máxima seguridad que ofrece la tecnología y la ciencia médica actuales, el paciente podrá ser operado sin percibir ningún tipo de dolor independientemente del tiempo que dure la intervención.

¿Qué tipos de anestesia hay?

Son cuatro los tipos de anestesia usados más frecuentemente para resolver una cirugía o procedimiento doloroso; la sedación, la anestesia general, la anestesia regional y la anestesia local.

  • La sedación consiste en un estado de adormecimiento y relajación que permite que ciertos procedimientos puedan realizarse sin dolor
    o molestias. Esto se realiza mediante la inyección de ciertas drogas a través del suero colocado a su ingreso en el quirófano.
  • En la anestesia general, el paciente permanece profundamente dormido, inconsciente y no percibe ningún tipo de sensación. No siente nada
    durante la cirugía y no recordará sobre la misma después. Se trata de una situación controlada y reversible, en la cual se emplea un número variable de fármacos. Algunos de estos se inyectan por vía intravenosa y otros se inhala en forma de gases o vapores. Además, se emplean una serie de técnicas para mantener la respiración y la circulación dentro de los límites normales, asistidos por un sofisticado equipo electrónico de monitorización. Una vez finalizada la intervención, el anestesiólogo revierte el efecto de la anestesia, recobrando el paciente la conciencia y el control de sus funciones vitales.
  • La anestesia regional consiste en bloquear e impedir la transmisión de los nervios en una zona o región del cuerpo. El resultado de esta técnica es que el paciente no sentirá dolor en la zona que estén operando. Para ello se inyecta una determinada solución de anestésico cerca de los nervios que reciben la sensibilidad de la zona. El paciente permanece despierto o con un sedación ligera, pero no tiene dolor. Las técnicas más frecuentes son la Epidural, la raquídea y los bloqueos de brazos y piernas.
  • La anestesia local, consiste en inyectar anestésicos en alguna parte del cuerpo para que se vuelva insensible por un tiempo.

En nuestro quirófano hemos añadido recientemente una nueva Estación de Anestesia, el Avance CS2 con ecoFLOW de General Electric, que nos permite un sistema de ventilación más avanzada, eficiente, adecuada y segura.

¿Cuáles son los riesgos?

Es importante que sepa que la anestesia es una técnica con muy baja incidencia de complicaciones. En caso de presentarse algún tipo de complicación, los anestesiólogos estamos preparados para prestar el tratamiento adecuado. Todas las intervenciones quirúrgicas y todas las anestesias conllevan algún tipo de riesgo, el cual es variable dependiendo, del tipo de intervención y del estado físico previo del paciente.